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La Omisión que Genera Malestar
Cada año, la entrega de nominaciones a los Oscars desata una serie de reacciones llenas de aprecio y frustración. En el 2025, una de las omisiones más desconcertantes fue la de ‘Cónclave’ en la categoría de mejor dirección de fotografía. A pesar de la calidad de las producciones destacadas, la película de Edward Berger, con la dirección de fotografía de Stéphane Fontaine, consideró que su ausencia es un error significativo.
Maestría Narrativa y Estética
La dirección de fotografía en ‘Cónclave’ fusiona narrativa y técnica de una manera que pocos filmes logran conseguir. Aunque otras películas como ‘Dune 2’ y ‘The Brutalist’ tienen méritos, la forma en que Fontaine trató cada escena logra una intensidad visual y emocional que debería ser reconocida por la Academia.
Sinergia entre Departamentos
El trabajo de Fontaine resalta cuando se considera su colaboración con el vestuario y el diseño de producción. Esta amalgama resalta en su uso del color, donde los tonos rojos, blancos y negros crean un contraste significativo, envolviendo cada plano en una atmósfera vibrante y cautivadora.
El Juego de Luz y Color
La iluminación y el diseño de color son cruciales para el desarrollo de la trama. La luz se utiliza no solo para resaltar la belleza visual del filme sino también para alimentar la atmósfera opresiva que define la narrativa. A medida que la historia avanza, se utiliza la luz natural para simbolizar un cambio maduro en la relación de los personajes con su entorno.
La Pregunta Esencial
La ausencia de ‘Cónclave’ plantea una pregunta difícil: ¿Qué filme debería haber sido dejado de lado en su lugar? Aunque mencionamos nominaciones comprometidas de otras producciones, el ejercicio de selección revela dónde reside el verdadero valor cinematográfico en este estudio visual.
Reflexiones Finales
Las decisiones de la Academia respecto a las nominaciones generan debates apasionados. Sin embargo, lo que se ignora de ‘Cónclave’ es simplemente una insensibilidad hacia el despliegue visual y narrativo que aporta al cine contemporáneo. La dirección de fotografía de Stéphane Fontaine, que mezcla creatividad y narrativa, debería ser considerada una obra maestra digna de reconocimiento en los Oscars.
